Las FARC siguen armadas y ahora se llaman “grupo residual”
Para ilustrar el tema que vamos a tratar en esta nota editorial, valga una observación que han hecho personas muy acuciosas en la materia; a un sapo, lo meten en una olla con agua y lo van calentando poco a poco, hasta que el agua hirviendo mata al pobre sapito que no se da cuenta en ese proceso continuo, que le están poniendo una temperatura que no puede resistir. Sí al sapo lo meten directamente en una olla de agua hirviendo, salta y se salva. El secreto es pues, ir adormeciendo en un proceso continuo las facultades de reacción del sapo infeliz…
Deja tus comentarios
Leave a Comment
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
0 Comments