Por: Santiago Castro 

En su comentario económico del día de ayer, que dirige Sergio Clavijo, la Asociación Nacional de Instituciones Financieras –ANIF-, insiste en que el Índice de Confianza al Consumidor cayó a sus mínimos históricos en lo que va de 2016. Esto se debería esencialmente a tres factores: “i) la desaceleración económica, donce el crecimiento bajó de 4,6% en diciembre de 2014 hacia el 2,5% en marzo de 2016; ii) los altos niveles de inflación; y iii) la fierte evaluación de la relación perso/dólar”. Para ANIF todo indica que una de las fuentes clave de la desaceleración económica será el consumo privado. 

Por su parte, Santiago Castro Gómez, Presidente de la Asobancaria, insistió ayer en su estimativo de crecimiento cercano al 2,3 % en 2016, muy por debajo del estimativo que ha expresado el Ministro de Hacienda, superior al 3%. Para Castro “Unas condiciones monetarias más adversas, una reversión de los influjos de inversión extranejra, una mayor incertidumbre tributaria y una mayor contracción de las importacionces de bienes de capital (en especial para la industria y el sector agropeciario)”explican su estimativo a la baja.

Como si fuera poco, Juan Martín Caicedo Ferrer, Presidente Ejecutivo de la Cámara Colombiana de la Infraestrcutra, insistió ayer en su columna de El Tiempo, en que la inseguridad jurídica en Colombia puede dar al traste con la tan cacareada nueva economía de la que habla el minsitro Cárdenas. Desincentiva la inversión, pues genera profunda desconfianza tanto en los inversores internacionales como en los locales. Con cautela publica la CCI en su últia revista, que también trae una entrevista al Presidente de la República, que la principal conexión carretera con Ecuador, la vía Popayán – Pasto, ha sido excluída de la tercera ola de las vías 4 G, por falta de recursos. Citan la respuesta que da la Agencia Nacional de Infraestrcutra: “… en la actualidad no se cuenta con recursos públicos de vigencias futuras, no existe una fecha determinada para iniciar el proceso licitatorio”.

La Revista Semana publica también en su última edición un informe sobre “La plata para las vías”, donde, aunque con un tono optimista, vuelva a sugerir que los recursos para el conjunto de las obras 4 G aún está en veremos. 

Mientras tanto, la mitad de los colombianos con alguna actividad económica se encuentran en la informalidad, lo cual genera un impacto grave en el sistema de seguridad social y el gobierno insiste en confundir desempleo con desocupación, asunto que esconde la realidad colombiana. 

Como si fuera poco, Omar Franco, Director del IDEAM, ha expresado su preocupación por la llegada de La Niña. La última vez le costó al país 11 billones de pesos y había menos alertas sobre su llegada. 

Esta nueva economía colombiana me está asustando. Prosperidad para todos.