Espinosa Fenwarth explicó que según los cálculos finales, Bioenergy costó 750 millones de dólares. Agregó que “en las primeras de cambio Ecopetrol tomó decisiones que no fueron las más sabias en el proceso del planeamiento y ejecución de la obra que se inició hace unos 10 años”.

Afirmó que tal vez el principal error en Bioenergy fue haber contratado al principio a una compañía española que no tenía experiencia en la fabricación de etanol.

También dijo que hubo un desfase de tiempos entre la producción agrícola, la zafra azucarera y la puesta en funcionamiento de la planta de Bioenergy.

“Hubo una serie de demoras que al final lo que hicieron es que se triplicara o se cuadruplicara el valor final de la inversión que hizo Ecopetrol y sus socios”.

Espinosa Fenwarth recalcó que El exministro Rubén Lizarralde, quien está encargado de la liquidación de Bionerrgy, ve -con toda razón- una posibilidad de reactivación de la empresa, pero naturalmente sobre unas condiciones distintas.