Es muy duro queridos amigos, entender que hay algunos colombianos, y no pocos, que no han sido capaces de comprender la magnitud del problema que vivimos. No de otra manera puede uno interpretar la actitud de unos cuantos, y son muchos, que tal vez no significan numéricamente nada con respecto a los 50 millones de colombianos de los cuales en su inmensa mayoría encontramos personas razonables, sensatas y cumplidores de sus deberes, pero esos otros se pregunta uno ¿Qué clase de seres humanos son? ¿Qué clase? ¿A qué clase de personas nos estamos enfrentando cuando salen a burlar la cuarentena?, que no es otra cosa que exponerse a la muerte y, desde luego, condenar a muerte a un número indeterminado de personas que no conocen. Es que es así; es que esta epidemia, como cualquier otra epidemia, y ésta es la peor que ha tenido que padecer el mundo en su historia, por su extensión, por sus alcances, por sus resultados, se multiplica de manera exponencial…