MOSCÚ – El presidente ruso, Vladimir Putin, se quejó ayer de la decisión de la Agencia Mundial contra el Dopaje, WADA, de dejar por fuera a su país de todas las grandes competencias deportivas internacionales durante los próximos 4 años, incluyendo los Juegos Olímpicos de Verano e Invierno y el Mundial de Fútbol, a causa de la falta de compliance del estado con la normatividad internacional contra el doping. La decisión podrá ser apelada en los próximos 21 días ante el CAS, Tribunal Arbitral para el Deporte, en su sede de Ginebra, Suiza.