Por Angela M. Henao F. 

Un buque con más de 950 inmigrantes que procedían de Libia ha naufragado tras volcar. Se teme que la mayoría hayan muerto ahogados ya que sólo 29 personas han sido rescatadas. 

También las autoridades trabajan para rescatar a casi 100 migrantes sirios que viajaban en otro barco frente a las costas de Sicilia y que también querían llegar hasta Europa. De estos 100 inmigrantes se calcula que más de 30 eran niños.

Las guerras que azotan a Siria e Irak y el hostigamiento del Estado Islámico en el norte del África son claramente grandes impulsores de la migración a Europa. Pero sirios e iraquíes no son los únicos que intentan escapar. Diariamente somalís, afganos, eritreos e Iraníes intentan llegar hasta territorio Europea buscando ayuda de sus antiguos colonos.

Esto sin duda alguna esta siendo el gran caldo de cultivo de un conflicto social y una crisis humanitaria.

Sólo un 30% de las solicitudes de documentación, de quienes si logran llegar vivos a las costas europeas, son exitosas. Es decir que el 70% se ve obligado a quedarse en la ilegalidad, haciendo trabajos no muy bien remunerados, sin garantías sociales y en una gran vulnerabilidad. 

Por ello la opinión pública internacional esta exigiendo políticas de cooperación mucho más fuertes y contundentes de parte de Europa para estos países sumidos en pobreza, hambre y conflicto.