Ayer tuvimos que vivir queridos conciudadanos, oyentes, amigos, otros episodio más de las famosas marchas de protesta. Ahora queremos destacar lo siguiente: lo primero sea que fue la repetición de la repetidera en marchas muy lánguidas, marchas sin concurrencia importante, que no la tiene ninguna, unos cuantos que se reúnen todas las veces que quieren salir a marchar, y como están ejerciendo un derecho constitucional, pueden marchar por donde les de la gana; muy bien, entonces hasta ahí el planteamiento es simple y contundente, es que están ejerciendo el derecho constitucional a la protesta. Nosotros nos estamos preguntando ahora ¿Qué pasa con las personas que sufren las consecuencias de esas marchas?(…) ¿El derecho a la protesta supone que no existe el derecho a la movilidad, el derecho al trabajo, el derecho a la vida de millones de personas que tienen que sufrir los efectos del derecho a la protesta?(…). El Derecho ajeno tiene que ser el límite del ejercicio de mi propio derecho, de otra manera lo que hay es el abuso del derecho…