En mi escrito que empezó a circular ayer en las Dos Orillas, he sostenido que huele a peligro, y huele a peligro por circunstancias muy distintas de las que teníamos en vísperas de las elecciones pasadas, de la primera vuelta, donde Iván Duque ganó por una amplísima diferencia, pero apareció el espectro de un Fajardo que desde luego no es él, ni él es líder político, ni él sostiene nada, ni eso es serio de ninguna manera, pero esa es la forma de expresión de mucha gente que hay que escuchar…