Tengo que confesar a ustedes queridos oyentes, que hago este editorial con un nudo en la garganta; estoy literalmente traspasado del dolor. Otra vez soldados nuestros, hijos de nuestro pueblo, es decir, hijos nuestros, fueron cobardemente emboscados y dieron la vida con su uniforme, la dieron por nosotros y eso es un hecho que yo no puedo superar. El dolor es más grande que cualquiera capacidad para soportarlo. Mueren soldados todos los días, soldados de la patria, en este holocausto infausto, ni siquiera mueren con gloria, es que no tienen la oportunidad de morir librando una batalla porque tienen que cumplir los principios del Derecho Internacional Humanitario. Nuestras Fuerzas Aéreas no pueden bombardear los campamentos de estos salvajes; no podemos fumigar sus cultivos porque de pronto la fumigación produce cáncer; no les podemos quitar los bienes porque hay que darle plenas garantías procesales a los que son dueños de medio

Tengo que confesar a ustedes queridos oyentes, que hago este editorial con un nudo en la garganta; estoy literalmente traspasado del dolor. Otra vez soldados nuestros, hijos de nuestro pueblo, es decir, hijos nuestros, fueron cobardemente emboscados y dieron la vida con su uniforme, la dieron por nosotros y eso es un hecho que yo no puedo superar. El dolor es más grande que cualquiera capacidad para soportarlo. Mueren soldados todos los días, soldados de la patria, en este holocausto infausto, ni siquiera mueren con gloria, es que no tienen la oportunidad de morir librando una batalla porque tienen que cumplir los principios del Derecho Internacional Humanitario. Nuestras Fuerzas Aéreas no pueden bombardear los campamentos de estos salvajes; no podemos fumigar sus cultivos porque de pronto la fumigación produce cáncer; no les podemos quitar los bienes porque hay que darle plenas garantías procesales a los que son dueños de medio