Con una mayoría clamorosa, el país sostuvo su derecho a pensar en sus grandes problemas, como se dice coloquialmente, los colombianos no se tragaron el cuento, no se lo comieron, los colombianos quieren que le hagamos frente a sus problemas reales, a sus durísimas circunstancias, a las dificultades por las que atraviesa la nación, como nación y cada persona en particular como persona, como ser humano, que quiere tener una familia, que quiere tener un horizonte, que quiere tener un trabajo…