El Consejo Gremial Nacional ha trabajado por la creación de condiciones de competitividad y eficacia de la cadena logística, de ahí que celebrara en 2011 la expedición del Decreto 2092 que eliminó el esquema de la llamada tabla de fletes y estableció un mecanismo de libertad vigilada para el transporte de carga por carretera.

De acuerdo con reporte del Doing Business del Banco Mundial, 2016, el costo de exportación de un contenedor en Colombia es de USD2.160 mientras que en Chile es USD685, en México USD1.677 y en Perú, USD788. Dicho reporte muestra, además, que de esos USD2.160, el costo del transporte doméstico en Colombia es USD1.525.

El país debe continuar con los esfuerzos por mejorar sus costos logísticos, fundamentales para la competitividad nacional. Cualquier retroceso significaría pérdidas para la cadena de suministro del transporte.

El Gobierno Nacional ha actuado con responsabilidad en el proceso de negociación en curso con los transportadores en paro y respaldamos sus esfuerzos por buscar la prevalencia del interés general y no retroceder en la modernización de la política de transporte que se ha adelantado en los últimos años, bajo los principios fundamentales de libre empresa e iniciativa privada, modernización de equipos y formalización en la actividad transportadora.

Rechazamos categóricamente las vías de hecho y reiteramos que los caminos institucionales deben preservarse en la atención de las demandas de cualquier sector económico o social.

Preocupa que tras un mes de cese de actividades de algunos sectores del transporte de carga, los efectos conlleven un alto impacto para el país y los colombianos. De acuerdo con cifras publicadas por otras organizaciones gremiales, este paro ha significado pérdidas por aproximadamente 746.000 millones de pesos, el principal puerto del país, el de Buenaventura, esté en el límite de su capacidad de almacenamiento, y preocupa al sector empresarial que proveedores colombianos pierdan mercado por posibles incumplimientos y demoras en la entrega de mercancía a compradores internacionales.

En este paro no está participando la totalidad de las organizaciones e transportadores y es prioritario que se garantice la vida, honra y bienes de aquellos transportadores que han decidido no hacer parte de este paro y han sido víctimas de actos violentos.